VIII. De cómo el marqués encontró un amigo en el caballero llamado don Juan
X. Donde el lector conocerá el prototipo de las doncellas de oficio
XVII. De cómo doña Ana comenzó a poner en práctica sus planes
XXI. De cómo el capitán Pero León recibió un aviso del cielo
XXVII. De cómo el señor Antonio de Mena era tan astuto como avariento
XXVIII. Lo que sucedió entre doña María de Mendoza y su padre
XXIX. Lo que el rey decidió respecto a la hija de don Juan y de doña María
XXX. De cómo doña María de Mendoza comenzó a poner en juego la astucia contra la fuerza
XXXII. Donde el señor Antonio empieza a demostrar su habilidad
XXXIII. Lo que sucedió en el convento mientras que el hidalgo iba a su posada
XXXIV. Donde se da cuenta del éxito que tuvo la traición del hidalgo
XXXVI. De cómo el señor Antonio procuró aumentar el precio en que tasó la carta de doña María
XXXVIII. De cómo el marqués de Poza se desesperó como un loco y lloró como un niño
XLI. El diablo se convence de que es posible hacer diabluras
XLVI. Donde se prueba que no hay nada que acreciente más el cariño...
L. De que se da cuenta de lo que había sido de nuestros amigos...
LII. Lo que puede suceder por cerrar precipitadamente una puerta
LIII. De la entrevista que tuvieron el paje y la doncella Inés
LVI. Donde se verá que un condenado no puede engañar y un diablo
LVII. Donde se verá lo peligroso que puede ser abrigarse con la capa del diablo
LVIII. De cómo faltó muy poco para que se volviese loca la princesa
LIX. De cómo quedaron muy amigos el paje y el hortelano, con lo demás que se verá
LXIII. De cómo sucedió al pie de la letra lo que había previsto el paje
LXV. Como la hija de don Juan se mostró digna discípula del paje
LXVIII. Lo que el rey decidió para frustrar los planes del diablo...
LXXI. De cómo el siguiente día comenzó felizmente para Blanca
LXXXII. El paje y el dominico creen a la vez que la casualidad les favorece
CXII. De cómo fue imposible terminar el asunto sin que hubiese cuchilladas
CV. Donde se verá que todavía representaba un gran papel la capa del diablo
CX. Donde se verá que no inútilmente había hecho el paje el sacrificio de su amor propio